La Fundación Tesãi conmemora el “Día de la Tierra” que nos encuentra atravesando una crisis planetaria sin precedentes marcada por una pandemia de origen zoonótico, muy vinculada a la agresión que estamos provocando al planeta.
En la medida de que se puedan establecer políticas, acciones, cooperación entre países y un mayor compromiso podemos marcar un cambio de tendencia.
ORÍGEN
Todo comenzó en 1970 cuando el senador estadounidense Gaylord Nelson instauró esta fecha para crear una conciencia global sobre los problemas de superpoblación, contaminación, destrucción de la Biodiversidad y otras adversidades medioambientales.
Incendios que se multiplican, millones de especies en peligro de extinción, miles de hectáreas que siguen siendo deforestadas y un virus al que no podemos vencer no parecen razones para festejar. Sin embargo, la sociedad civil, la ciencia y algunos compromisos políticos pueden revertir la crisis climática que padecemos.
Celebramos el Día de la Tierra, una efeméride que nació hacia 50 años como un movimiento ciudadano para impulsar acciones que beneficien al planeta y establecer un diálogo de amplio aliento sobre los daños causados al ambiente, así como la importancia de preservar el ecosistema.